La aceptación de una herencia es un acto en el que los herederos no sólo reciben bienes del difunto, sino que también deben hacerse cargo de posibles deudas. En España se han incrementado las renuncias de herencias. Como heredero, tienes derecho a aceptar o renunciar a la herencia. Ahora bien, ambas decisiones conllevan consecuencias jurídicas que debes conocer.
¿Se puede aceptar una herencia sin ir al notario? ¿Cómo renunciar a una herencia? En este artículo explicamos las distintas alternativas para los herederos y qué cautelas debes considerar antes de tomar una decisión definitiva.
Es una pregunta recurrente entre los herederos. ¿Debo aceptar o renunciar a la herencia? En la mayoría de casos en el que se plantea existe una deuda asociada a la repartición o un desapego familiar con respecto al difunto.
Es importante valorar los pros y contras de cada alternativa antes de tomar una decisión en firme. Determinados actos por parte de los herederos se consideran irrevocables y no permiten dar marcha atrás.
Un heredero puede actuar de tres formas diferentes ante una herencia.
Esta modalidad de aceptación de herencia puede llevarse a cabo de dos maneras:
La aceptación de una herencia con testamento (o sin él) obliga al heredero a responder a las deudas o responsabilidades patrimoniales que tuviera el difunto, ya sean conocidas o desconocidas. Deberá hacerlo tanto con el patrimonio heredado como con el propio.
✅ Recuerda que el Notario no está obligado a incluir todos los bienes y deudas de una herencia si no ha sido informado de su existencia. Corresponde a los herederos la tarea de investigar los bienes del difunto. Es decir, podrían aparecer deudas desconocidas por las que deberán responder los herederos que hayan aceptado la repartición.
Al contrario que la aceptación pura y simple, aquella a beneficio de inventario solo obliga a que el heredero haga frente a las deudas del difunto a través del patrimonio que ha heredado. Es una modalidad de aceptación de herencia que protege los bienes del heredero.
✅ Antes de aceptar una herencia se recomienda que el heredero solicite un inventario de bienes del fallecido para tomar una decisión mejor informada.
La renuncia de una herencia debe ser siempre expresa. Esto significa que debe expresarse mediante una escritura pública ante Notario. También se conoce como repudiación de herencia y es un acto irrevocable. Por lo que, una vez expresada la voluntad, el heredero no puede cambiar de opinión.
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Si todavía no tienes claro si deseas aceptar o repudiar la herencia es importante que consultes a un abogado especialista en herencias.
Además, deberías evitar determinados actos que puedan interpretarse como una aceptación tácita de herencia como:
¿Estás considerando aceptar la herencia? Te contamos cómo funciona este procedimiento.
El Código Civil no especifica un plazo específico para aceptar una herencia, ya que no puede forzarse a un heredero a tomar una decisión. Sin embargo, la jurisprudencia ha estimado que podría considerarse un plazo mínimo de 30 años a partir del fallecimiento.
Ahora bien, recuerda que determinados actos que realices podrían considerarse una aceptación de herencia tácita.
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Se recomienda que el documento de aceptación de herencia sea público y esté firmado ante Notario. De esta forma contendrá todas las garantías legales.
Sí, se puede aceptar una herencia tácitamente sin acudir a un Notario cuando el heredero realiza actos con los bienes que forman parte de la herencia, como alquilar una propiedad.
La renuncia a una herencia sólo podrá realizarse tras el fallecimiento del testador.
Para renunciar a una herencia es obligatorio manifestar la voluntad expresamente, a través de un documento notarial.
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La principal consecuencia de renunciar a una herencia es que dicha decisión es irrevocable. Es decir, una vez firmado ante Notario el heredero no podrá desdecirse transcurrido un cierto tiempo.
Por supuesto, el heredero tampoco percibirá ningún bien, derecho ni deuda que correspondiese al difunto. Sin embargo, una consecuencia importante de repudiar una herencia es que la herencia pasa a las sucesivas líneas de herederos. Es decir, una deuda podría pasar a los hijos o nietos del heredero.
Para los casos en los que una herencia implica unas deudas muy elevadas y todos los herederos (ascendientes y descendientes) renuncien a ella, será el Estado, la Comunidad Autónoma o la Diputación Foral quien la asume.
No existe un plazo establecido para ejercer el derecho de renuncia a una herencia, aunque siempre deberá hacerse tras el fallecimiento del causante.
Renunciar a una herencia no tiene un coste directo en concepto de tasas o impuestos. Solo habrá que formalizar una escritura pública ante Notario que oscila entre 50 y 100 euros.
No es posible renunciar a una herencia aceptada expresamente. La aceptación de herencia es un acto irrevocable.
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Aunque el Código Civil no especifica un periodo máximo para reclamar una herencia, la jurisprudencia en alguna ocasión ha delimitado un periodo máximo de 30 años.
Si un heredero no renuncia a una herencia no debería pasar a sus hijos salvo que estos estuvieran también incluidos en la repartición.
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