La bicicleta eléctrica se ha convertido en el medio de transporte preferido de muchos españoles. Esquivar el tráfico para ir a trabajar o desplazarse sin restricciones por las grandes ciudades son solo algunas de sus ventajas. Además, ¿por qué gastar tu energía pedaleando por la mañana si puedes utilizar con su motor eléctrico? Cada vez son más los que optan por este transporte alternativo para hacer más fácil su día a día.
Sin duda, la bicicleta eléctrica o e-bike es el futuro de la movilidad sostenible, pero son muchas las dudas que surgen a la hora de decidir entre la bicicleta eléctrica o la tradicional. ¡Te contamos todo lo que debes saber sobre las bicicletas eléctricas en este artículo!
La bicicleta eléctrica comparte gran parte del diseño, estética e ingeniería con las bicicletas convencionales. Es decir, sigue teniendo un par de pedales que hacen funcionar las cadenas y, por tanto, mueven las ruedas.
Sin embargo, el aspecto fundamental que las diferencia es su motor eléctrico. Se trata de una asistencia al pedaleo que disminuye el esfuerzo, ¡especialmente cuando te enfrentas a cuestas empinadas!
Normalmente, el motor está situado cerca de los pedales o en la rueda trasera. Gracias a la batería recargable se puede cargar tantas veces como se quiera. Es importante recordar que el motor no impulsa a la bicicleta automáticamente, sino que se acciona solo como ayuda al ciclista.
La principal ventaja de las bicis eléctricas es su respeto hacia el medioambiente, ya que se trata de un medio de transporte que no emite CO2, ¡lo que la convierte en un vehículo 100% sostenible!
Gracias a la ayuda al pedaleo del motor eléctrico, permite acortar el tiempo de desplazamiento. Además, exige un menor esfuerzo para llegar a tu destino, por lo que es ideal para aquellas personas que buscan un medio de transporte ágil para ir al trabajo o a la universidad.
Además, permite estacionarse en casi cualquier sitio. ¡Evitarás perder tiempo por la mañana para encontrar un hueco libre! De hecho, existen modelos de bicicleta eléctrica plegable ideales para dejar en un trastero o armario. Algunas incluso reducen sus dimensiones hasta los 75 centímetros ya plegadas.
En algunas ciudades, permiten esquivar las restricciones de los vehículos de motor, pueden estacionarse en parkings especiales o circular por los carriles bici habilitados.
Te puede interesar: Normativa de circulación de los patinetes eléctricos en España
¡Pero no todo pueden ser ventajas! Es importante que también conozcas los inconvenientes de la bicicleta eléctrica antes de hacerte con una. La primera gran diferencia que suelen notar las personas que practican ciclismo habitualmente es que las bicis eléctricas son más aparatosas de transportar.
Además, según del modelo el motor eléctrico puede hacer ruido. Precisamente la fuerza con la que el motor empuja a la bici provoca también que el uso de los frenos se acentúe, por lo que hay que reemplazarlos antes que los de la bici normal.
En cuanto a la batería, es necesario planificar las salidas con antelación para que la bicicleta pueda cargarse. Además, es muy recomendable hacer un uso responsable de esta, pues podría desgastarse con facilidad.
¿Estás pensando en comprar una bicicleta eléctrica? ¡No te pierdas estos consejos para hacerte con una que se adecue a tus necesidades!
Existen diferentes tipos en función del medio por el que vayas a circular. Por ejemplo, las bicicletas eléctricas de montaña suelen ser más pesadas y tienen mayor suspensión. Si por el contrario buscas hacer trayectos urbanos más cortos, hazte con una más ligera de ciudad.
Escoge la autonomía en función de la distancia que vayas a recorrer. ¡Este es uno de los aspectos más importantes a la hora de comprar una bicicleta eléctrica! Los modelos más comunes ofrecen entre 40 y 60 kilómetros de autonomía. Sin embargo, algunos modelos premium permiten recorrer hasta 140 kilómetros sin que se agote la batería.
Aun así, ¡no olvides que una bici eléctrica no deja de ser una bicicleta! Si un día agotas la batería antes de llegar a tu destino, siempre podrás pedalear.
Existen dos tipos de baterías: las extraíbles y las integradas. Es recomendable que escojas una batería para bicicleta eléctrica extraíble. ¡Evitarás tener que maniobrar con ella cada vez que la quieras recargar!
Si el motor eléctrico se encuentra en la rueda trasera, el peso estará menos repartido. Opta por una con el motor en el eje central, pues resultará más estable y segura a la hora de pedalear.
El reglamento 168/2013 de la legislación europea define a la bicicleta eléctrica como aquella “equipada con un motor eléctrico auxiliar, de potencia máxima inferior o igual a 250 W”. Este motor es el encargado de regular la velocidad. De hecho, ¡es obligatorio que deje de asistir cuando la velocidad del vehículo supere los 25 km/h o si el ciclista deja de pedalear!
Revisa en profundidad las características técnicas del fabricante ya que, si se supera alguno de estos límites de potencia, ¡el vehículo pasaría a ser considerado como un ciclomotor!
Algunas bicicletas eléctricas baratas no vienen bien equipadas. Hazte con una que incluya luces delanteras, retrovisores, un cestillo o una cadena de seguridad para estacionarla. Si buscas una bicicleta eléctrica de segunda mano, pídele al vendedor las instrucciones y asegúrate de que te la vende con todos sus accesorios.
Además, ¡comprar los accesorios por separado en una tienda especializada te resultará más caro! Cuanto mejor equipada la adquieras, con más comodidad y seguridad circularás.
Te interesa: 10 dispositivos de seguridad innovadores para ciclistas
Si quieres comprar una bicicleta eléctrica para uso diario, ¡el tiempo de carga será un aspecto a tener muy en cuenta! Algunos modelos más económicos tardan hasta 8 horas en completar la carga de la batería.
Es recomendable que inviertas un poco más de dinero en hacerte con una de carga rápida. De hecho, ¡las hay que en menos de 3 horas vuelven a estar al 100%!
El precio de una bicicleta eléctrica varía en función de las prestaciones, calidad y autonomía. Normalmente, suele oscilar entre los 500 y los 4.200 euros para los modelos más sofisticados.
Pero, ¿en qué aspectos afecta una económica? Una bicicleta eléctrica barata presentará algunas carencias en las siguientes prestaciones:
¡Consejo a tener en cuenta! Ya que se trata de una inversión considerable, un Seguro de Bicicleta Eléctrica te puede resultar muy útil en caso de robo o pérdida. Consulta cómo se protegen los distintos tipos de seguros a la bicicleta.
A la hora de calcular si verdaderamente compensa comprar una bicicleta eléctrica por el ahorro en gasolina, ¡es importante conocer el coste de la recarga!
Suponiendo que compras una bicicleta eléctrica con motor de 250W y batería de 624Wh (es decir, las bicicletas eléctricas más comunes en España), con una recarga diaria de 5 horas los 20 días laborales al mes, el coste por cada recarga será de 15 céntimos aproximadamente.
O, dicho de otra forma, ¡la alimentación de la bicicleta eléctrica rondará los 6 euros de factura eléctrica al mes, impuestos incluidos!
Si quieres hacer un uso diario, definitivamente es recomendable ser propietario de tu propia bicicleta eléctrica. Sin embargo, algunas ciudades en España ofrecen servicios de alquiler de bicicletas económicos.
En Madrid, por ejemplo, el abono anual de BiciMAD tiene un coste de 25 euros (si no tienes el abono transporte de la Comunidad de Madrid) y 15 euros si cuentas con uno. A ello deberás sumarle el uso: la primera media hora tiene un coste de alquiler de 0,50 euros y 0,60 las sucesivas.
Si quieres hacer un uso ocasional, el alquiler de una bicicleta eléctrica en Madrid durante 1 hora es de 2 euros.
Barcelona ofrece un servicio municipal llamado Bicing. El coste de la tarjeta de tarifa plana tiene un coste de 50 euros al año, mientras que la de uso ocasional es de 35 euros anuales. A eso hay que sumarle el tiempo de uso: 0,35 euros la primera media hora de tarifa plana o 0,55 euros si tienes la tarifa de uso.
Aunque no es obligatorio el seguro de bicicleta eléctrica en España, ¡todos los expertos recomiendan tener uno! De hecho, estos transportes sostenibles se consideran incluso más peligrosos que las bicis convencionales.
No es extraño que, de vez en cuando, puedan sufrir algún tipo de deterioro. Las averías más comunes en las bicicletas eléctricas se producen en la pantalla (14%) y en la batería (13%).
Además, la inversión en la compra de una bicicleta eléctrica compensará su seguro. ¡Evita cualquier daño, pérdida o robo gracias a sus coberturas y circula sin miedo!
Y recuerda, cuando montes en bici lo más importante es garantizar tu seguridad y la de los que te rodean. Gracias al Seguro de Responsabilidad Civil de GENERALI, en caso de causar un daño accidental a cualquier peatón o mobiliario urbano, no tendrás que responder con tu patrimonio personal.
Siéntete seguro en la carretera con nuestro fantástico contenido sobre seguridad vial:
¿Cuál es la normativa aplicable a los patinetes eléctricos en españa?
Como conducir con seguridad cerca de peatones y ciclistas
Consejos de seguridad vial para ciclistas