Previo al sismo
Ten localizadas las salidas de emergencia del edificio dónde trabajas o vives, las zonas más seguras (esquinas de pared o mesas resistentes) y las más peligrosas (ventanas, espejos, lámparas y objetos o mobiliario sin sujeción). Si en tu zona son habituales los movimientos sísmicos, disminuye los riesgos asegurando los objetos que puedan causar daños y evita colocar los más pesados en zonas altas.
Se recomienda disponer de ciertos alimentos de reserva, principalmente agua embotellada y comida no perecedera, así como botiquín, linterna, pilas, extintor y silbato. Organizar y planificar con la familia el modo de actuación en un posible terremoto es esencial para evitar daños. Ten a mano los teléfonos de asistencia y emergencia, así como el mecanismo de cierre de las llaves de agua, luz y gas.