Una casa bien iluminada puede lucir completamente nueva. Le damos poca importancia a la iluminación de nuestra casa, ¡y es un error! Vivir en un piso pequeño o muy oscuro no te obliga a renunciar a una casa bien iluminada. Siempre puedes aprender a jugar con las luces y las sombras en las habitaciones, combinar diferentes tonos o aprovechar al máximo la luz natural.
Pasas mucho tiempo en casa, y la luminosidad afecta a tu estado de ánimo. Ahora bien, el secreto no está en deslumbrar todas las estancias con puntos de luz muy intensos, sino en encontrar el equilibrio perfecto buscando cómo potenciar las herramientas con las que ya cuenta tu vivienda.
Quizás tengas ventanas a las que no les sacas partido o un pasillo interior que oscurece la vivienda. En algunos casos, las habitaciones estrechas son el problema… Tengas la casa que tengas, ¡existen múltiples soluciones! Presta atención a estos 10 trucos para mejorar la iluminación de casa y exprime las posibilidades de tu vivienda (y la decoración) al máximo.
Una iluminación en casa adecuada aporta encanto y personalidad a la vivienda. La combinación de tonos, intensidades y sombras permite dotar a cada estancia de un ambiente distinto. ¿Quieres recrear una sala de juegos o de cine? Los tonos apagados y cálidos conseguirán convertir la habitación en todo un cine en casa. Y si lo que buscas es un espacio para teletrabajar, aprovechar la luz natural e incluir una luz focal será esencial para mantener la concentración y evitar que la vista se canse.
Estas son las ventajas de tener una iluminación en casa adecuada a los espacios y distribuida con criterio:
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Existen varios tipos de iluminación de casa con la que puedes jugar. Cada tipo de luz lleva consigo una personalidad, así como un tono e intensidad. En función del tipo de ambiente que quieras introducir en la estancia, deberás escoger una u otra. ¡Descubre todos los tipos de iluminación de casa!
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¿Quieres potenciar la iluminación en casa? ¡Aplica estos sencillos trucos en tu vivienda y consigue un ambiente diferencial!
Un error común a la hora de iluminar una habitación o salón es incluir un único emisor de luz. Opta por combinar varios tipos de luz: uno protagonista del tipo general, junto con otros elementos ambientales. Conseguirás jugar con los contrastes por la noche y adaptar el ambiente a la hora del día. Las lámparas de pie, por ejemplo, son ideales para conseguir este efecto.
Incluir una luz muy intensa acabará por saturar el ambiente. Evita las bombillas con potencia muy alta. Además, ¡tu factura lo agradecerá!
En estancias puramente funcionales como la cocina, el baño o el pasillo, es frecuente colocar un único punto de luz. Esto provocará que la escancia quede descompensada. Opta por un conjunto de 4 o 5 focos encastrados distribuidos a lo largo de la estancia.
¿Sabías que las paredes de tonos blancos potencian la luminosidad de la casa? Entre los trucos para iluminar una casa oscura más efectivos es hacer uso de tonos blancos o muy claros. Los blancos, grises claros, beige, tonos corales y rosas suaves son los más usados.
Incluye, como mínimo, una luz focal en las estancias sociales como el comedor, salón o sala de juegos. Conseguirás inventar un espacio adicional dentro de la misma habitación. ¡Un pequeño flexo para leer sobre una butaca quedará de perlas!
El pasillo es un espacio del hogar al que raramente le prestamos atención a la hora de decorar o iluminar. Y, sin embargo, ¡es el acceso al resto de habitaciones! La cantidad de pasos diarios por una familia es alta, por lo que merece la pena dedicarle tiempo a su potencial.
Al tratase de un elemento de la casa puramente funcional, lo más recomendable es no gastar demasiado en iluminaciones ambientales ni secundarias. Coloca una principal de luz blanca que permita una buena visibilidad. De la misma forma, la iluminación para las escaleras de casa debería ser funcional y general.
¡No todo es invertir en bombillas y lámparas! Los espejos también permiten distribuir la luz por toda la estancia. Además, conseguirán que la habitación parezca más espaciosa.
Además de trabajar la luz, ¡conseguirás un estilo decorativo ideal! Coloca lámparas de suspensión decorativas en el comedor para conseguir un ambiente más relajado durante las cenas en familia. Eso sí, asegúrate de alinear las lámparas con el centro exacto de la mesa.
Las puertas de cristal o aquellas de madera con vidrios cuadrados encastrados permiten llevar la luz natural a aquellas habitaciones interiores. ¿Por qué no aprovechas a mejorar la iluminación del salón gracias a la luz natural que entra por la cocina?
No abuses de las cortinas gruesas. Una buena idea para conservar tu privacidad sin renunciar a la luz natural es instalar cortinas semi opacas o estores. Si le quieres dar un toque decorativo, ¡opta por los estores venecianos!
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