¿Alguna vez te has planteado dejarlo todo, incluida tu casa en la ciudad, e irte a vivir a un pueblo? Cada vez son más las personas que deciden comprar una casa alejada del bullicio y llevar una vida más saludable.
Tanto es así que durante el año 2020 aumentaron un 46% las búsquedas de fincas rústicas de personas que buscaban cambiar la contaminación para estar en contacto con la naturaleza.
¡Pero no todo el mundo puede permitirse el lujo de disfrutar de las ventajas de vivir en un pueblo! La mayoría de los que se decantan por la vida rural tienen opción para teletrabajar desde allí. Aunque también los hay que dejan su trabajo para montar el proyecto de sus sueños: desde regentar un pequeño hotel rural hasta dedicarse a la agricultura o a la ganadería.
Sabemos que es algo que llevas meditando mucho tiempo, ¡y quizás es momento de hacerlo realidad! Te mostramos todas las ventajas e inconvenientes de vivir en un pueblo.
Vivir en un pueblo tendrá beneficios para tu bolsillo. Aunque la lista de la compra, la gasolina o la ropa seguirán costando lo mismo, comprar una casa en el medio rural es un 52% más barato que vivir en la ciudad. Sin olvidar los impuestos municipales, el transporte y el ocio, que también supondrán un ahorro con respecto a la vida urbana.
Poder levantarte todos los días en contacto con la naturaleza no tiene precio. Se acabaron los atascos por las mañanas, la contaminación o las prisas por llegar puntual al trabajo. Irte a vivir a un pueblo te ayudará a reducir tus niveles de estrés. ¡Notarás cómo tu calidad de vida mejora, y eso te hará sentirte mejor tanto física como mentalmente!
Para todos aquellos cansados del ruido, las aglomeraciones y el tráfico de las ciudades, ¡los pueblos son la mejor opción! Puedes disfrutar de una gran tranquilidad en cualquier momento del día que contribuirá a una reflexión y desarrollo mental.
¡Formar una familia en un pueblo es una gran idea! La vida en un entorno rural contribuye a que tus hijos pasen más tiempo al aire libre y desarrollen una sensibilidad por la ecología. Además, la vida al aire libre contribuye a la madurez de los más pequeños y a la unión familiar.
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Si no sabes por dónde empezar, la plataforma Vente a Vivir a un Pueblo te ayuda a escoger un pueblo de España a tu gusto gracias a diferentes filtros geográficos, de servicios, ¡y hasta por aquellos que cuentan con conexión 4G!
Desde un médico especialista, un colegio cerca de casa o tiendas y locales de ocio variado, la oferta es mucho menor en un pueblo. Antes de irte a vivir a uno tendrás que valorar si puedes o no prescindir de algunos servicios como las urgencias, las oficinas para trámites burocráticos en tu zona o una biblioteca para tus hijos.
Así como vivir en la ciudad ofrece una gran variedad de transportes públicos y conexiones sin necesidad de usar tu propio vehículo, en un pueblo tendrás que ser más dependiente del coche.
Tómatelo como una ventaja o desventaja. Si eres una persona muy sociable, no tendrás problema con la cercanía que te ofrece la vida rural y sus vecinos. Sin embargo, si buscas más bien la privacidad y poder pasar desapercibido, un pueblo no es la mejor opción.
Aunque las nuevas tecnologías avanzan rápido, todavía un 13% de las zonas rurales en España no tiene un acceso a Internet con banda ancha. Antes de irte a vivir a un pueblo, ponte en contacto con tu operador y asegúrate de que hay ¡una buena conexión a Internet!
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