Sustituir la arena de la playa, el bañador y la tranquilidad por los atascos y el estrés diario no es nada fácil. La vuelta al trabajo puede hacerse muy cuesta arriba. Llevas semanas sin escuchar el sonido del despertador y te aterra la idea de regresar a la rutina. ¡Debes encararlo con otra actitud! Consigue una vuelta al trabajo con humor y positividad siguiendo estos consejos.
Consecuencias de la vuelta al trabajo
Saber que el fin de las vacaciones está a la vuelta de la esquina produce infelicidad y cierta angustia. Para algunos es una fase traumática. Las consecuencias más comunes suelen ser falta de energía, irritabilidad, estrés e insomnio. Se suele hablar comúnmente del síndrome postvacacional.
Los expertos que han estudiado este cambio drástico en la rutina distinguen dos actitudes. Cuando la motivación es interior predomina la ilusión, la vocación o la autorrealización. En esos casos las consecuencias serán leves y forman parte de la normalidad.
Sin embargo, muchas personas tienen una motivación exterior: aquella que nace de la necesidad de trabajar para generar dinero. Es la más habitual entre los trabajadores, y puede desencadenar cuadros más severos como el rechazo a la rutina, la ansiedad o incluso la depresión.
La mayoría de personas se resiste a su vuelta al trabajo. No se recomienda encarar la nueva normalidad de forma abrupta. Al contrario, existen formas de preparar la mente y el cuerpo para encarar el cambio de forma más saludable.
10 consejos para afrontar la vuelta al trabajo
Nuestra mente no debe jugarnos una mala pasada. Estas son 10 recomendaciones para volver al trabajo con más ánimo.
Anticipa un poco tu regreso
La peor decisión que puedes llevar a cabo es pasar de la desconexión absoluta a la angustia laboral. No conviene planificar tu operación retorno un día antes de la incorporación. Regresa de tus vacaciones uno o dos días antes para aclimatarte.
Retoma tus hábitos de sueño
Es probable que hayas descuidado tus hábitos de sueño durante tus vacaciones. Acostarte un poco más tarde o no madrugar trastocarán tu estado de ánimo durante tu vuelta al trabajo. Se recomienda que unos días antes del regreso vayas retomando progresivamente tu rutina de descanso.
Cuida tu alimentación
De la misma forma que el descanso, la alimentación saludable te ayudará a sobrellevar tu regreso. Apóyate en una dieta saludable rica en frutas y verduras. Merece la pena que inicies una dieta detox para eliminar todas las toxinas que has ingerido durante las vacaciones.
Productos como el apio, el brócoli, las espinacas, los cítricos o la piña purifican el organismo. Incorpora superalimentos como el ajo, el jengibre o el kale en tu dieta para contar con un extra de energía. Además, el cacao sin azúcares añadidos es un potente regulador del estado de ánimo.
Planifica tus primeros días
Elabora un plan de readaptación. Los primeros días pueden resultar abrumadores y el trabajo pendiente podría provocarte ansiedad. Trata de organizar tu primera semana. Concédete varias horas para revisar el correo electrónico con calma y ponerte al día.
También merece la pena que planifiques aquellas tareas que vas a abordar durante tus primeros días. Hacerlo te concederá cierta perspectiva y sentirás que tu regreso es menos irregular.
Mantén una actitud optimista
El poder de la mente es capaz de cambiar radicalmente tu actitud. Aunque sientas una cierta desmoralización, mantener una actitud positiva te ayudará a sobrellevar el cambio. Trata de plantearte una vuelta al trabajo con ánimo.
No renuncies a tu ocio
La vuelta al trabajo no debería hacerte renunciar a tus hobbies. Retoma aquellas actividades que te hacen feliz desde el primer día. Ya sea ir al gimnasio, unas clases de baile o la lectura… Refúgiate en tus pasiones, especialmente durante los primeros días, que serán los más complicados.
Retoma el contacto con tus compañeros días antes
Otra forma de evitar que el cambio sea tan abrupto es retomar pequeños contactos con algunos de tus compañeros. Comparte con ellos cómo han sido tus vacaciones un día antes de tu incorporación. El objetivo no es retomar el lado profesional, sino comenzar con la parte más humana de tu trabajo.
Practica la meditación
¿Conoces la disciplina mindfulness? Consiste en potenciar el momento presente; el aquí y ahora. Existen distintas técnicas de relajación que pueden ayudarte a encontrar un equilibrio mental saludable. Los ejercicios de respiración reducen los niveles de ansiedad y son una manera de mejorar tu bienestar.
Delega durante tus primeros días
Si tu posición profesional te lo permite, delega ciertas tareas durante los primeros días tras tu vuelta al trabajo. Compartir con tus compañeros que quieres enfocar tu regreso de manera progresiva te ayudará a encontrar su respaldo. Sé paciente y no trates de alcanzar tu máximo de productividad en tu primera semana.
Plantéate un cambio
¿Los síntomas del síndrome postvacacional se alargan? ¿Te sientes más desmoralizado de lo normal? Si pasada la primera semana sigues sintiéndote abrumado quizás sea un buen momento para plantearse un cambio. Es posible que encarar un nuevo reto te permita recuperar la motivación.
Vuelve al trabajo con humor
Se suele decir que el humor lo cura todo. Intenta no centrarte en aquello que no puedes controlar (como es tu fecha de vuelta al trabajo después de vacaciones), sino en lo que sí puedes cambiar (tu actitud). Plantea una vuelta al trabajo con humor.
Rememora aquellas situaciones graciosas en el trabajo. Recuerda esos momentos graciosos, que seguro que los habrás vivido.
Frases de vuelta al trabajo graciosas
Para ayudarte a encontrar cierta inspiración te traemos algunas frases de vuelta al trabajo graciosas:
- “He descubierto que mi estado ideal es estar de vacaciones”.
- “Todo el exceso es malo, menos las vacaciones”.
- “Mi mes preferido es agusto”.
- “Si has disfrutado de tus vacaciones, recuerda que las próximas pueden ser mejores”.
- “No llores porque se terminó. Sonríe porque sucedió”.
- “Si todo el año fuese fiesta, divertirse sería más aburrido que trabajar”.
- “Si tú sabes lo que vales, ve y consigue lo que mereces”.
- “La mejor forma de comenzar el día es con una sonrisa… ¡y un café bien cargado!”.
- «El lunes es ese día de la semana que, aunque lo intentemos ignorar, siempre termina encontrándonos”.
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