Infórmate sobre las diferencias entre contenido y continente en el seguro de hogar leyendo este post. Descubre además cómo se calculan sus valores. Aquí tienes toda la información que precisas para conocer en qué consiste el continente y qué es el contenido.
¿Qué es el continente y el contenido en el seguro de hogar?
Quienes ya peinan canas -o, directamente, ni eso- recordarán con cariño el mítico Barrio Sésamo. Uno de los personajes estrella de aquel show para niños era sin duda Coco, ese descacharrante ser de color azul que explicaba conceptos como “arriba y abajo” o “izquierda y derecha” de manera tan sencilla y simpática como reiterativa.
Habría bastado Coco para explicar, a grandes rasgos, qué es continente y contenido, conceptos que todos conocemos: el primero es el espacio que aloja el segundo. Sin embargo, esta diferenciación no resulta tan sencilla cuando nos metemos en harina aseguradora. Especialmente cuando nos referimos al seguro de hogar.
¿Quieres saber qué son y sus diferencias? ¡Te lo contamos a continuación!
Cuáles son las diferencias entre continente y contenido en el seguro de hogar
Pasamos a explicaros con más detalle la diferencia entre continente y contenido, con el fin de que entendáis con claridad que es el contenido y el continente.
En los seguros de hogar se considera como continente tanto la estructura del edificio como los elementos de construcción, esas partes de la edificación generalmente adjuntas a la estructura que no se pueden disociar de ella sin provocar un daño en el edificio. Por eso no sólo los cimientos, los muros, las paredes, los techos y las columnas formarían parte del continente, sino también las instalaciones del agua, la calefacción, calentadores y aire acondicionado, siempre que estén instalados de forma fija en el inmueble. La telefonía o la electricidad, antenas o elementos de decoración fijos como la pintura, el parqué, la moqueta y los armarios empotrados. En el caso de chalets o similar, la piscina se considera continente, así como las instalaciones deportivas y muros.
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Todos los seguros de hogar deben contar, y más aún con tantos elementos en juego, con una garantía de responsabilidad civil, que cubra al asegurado de los daños que se puedan ocasionar a terceros; por ejemplo, si cae una maceta desde la vivienda y ocasiona algún desperfecto. Pero vamos a resolver la segunda cuestión…
El contenido engloba todos aquellos elementos que, encontrándose en el interior de una vivienda determinada, no formen parte de su estructura, sirvan de utilidad o a modo de decoración. En esta amplia categoría incluiríamos casi de todo: muebles, mobiliario de cocina, electrodomésticos, ropa, tecnología, material deportivo…
Eso sí, en el caso de que contemos con objetos de un valor especial (joyas, obras de arte o cualquier otra pieza de un elevado precio) deberemos comunicárselo a la aseguradora por si hubiera que declararlas y valorarlas de modo independiente al resto del contenido.
¿Cómo se puede calcular continente y contenido en el seguro de hogar?
No sólo es importante saber qué es el continente y el contenido de un seguro de hogar, pues calcular el valor de continente y contenido es también relevante. Especialmente al contratar un seguro de hogar, pues tendremos que indicar de la manera más exacta posible cuánto costaría reconstruir tu casa (en función del valor del continente) y cuánto cuesta lo que guardas en ella (el valor del contenido).
Por ello es necesario realizar una estimación de ambas partes por separado. ¿De qué manera? Te lo explicamos ahora mismo.
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Calcular el continente
Para calcular el valor del continente la aseguradora debe saber qué capital quiere el cliente incluir como continente en el seguro, ofreciéndole antes una estimación previa, que generalmente se realiza multiplicando los metros cuadrados de superficie construida por el coste medio de la reconstrucción de una vivienda del mismo tipo, características parecidas y en la misma ubicación.
Existen dos maneras de asegurarlo: a valor total, con lo que engloba todo el capital asegurado, por lo que en caso de que sucediera una desgracia que destruyese la vivienda el seguro se encargaría de toda la reparación y reconstrucción; y a primer riesgo, opción más económica, pero con menores garantías, con lo que en ciertas circunstancias el seguro se haría cargo solo de una parte del coste requerido independientemente del valor total de la vivienda. En este caso el siniestro no es susceptible de infraseguros.
Calcular el contenido
Para calcular el valor del contenido deberemos realizar un completo inventario de nuestras pertenencias más importantes e informar a nuestra compañía de seguros, teniendo en cuenta que joyas, obras de arte y otros objetos especiales suelen asegurarse a valor total.
La valoración del resto de objetos la determinarán también entre ambas partes, generalmente teniendo en cuenta su valor de reposición: es decir, calculando el valor de cada objeto en el mercado en el momento.
Seguro de continente o contenido: ¿cuál te conviene más?
Hemos podido resolver claramente la cuestión ¿qué es el continente y el contenido de un seguro de hogar?Pero en cuanto a cuál de estos aspectos te conviene más cubrirno podemos darte la solución, pues dependerá de cuál sea tu caso particular, tus circunstancias y tu perspectiva.
Al final la única respuesta es que el seguro que más te conviene es el que se ajusta mejor a las necesidades de la vivienda y de tus expectativas, por lo que es un factor muy positivo que el seguro sea flexible.
En algunas ocasiones quizás no convenga un seguro de continente y contenido y baste con proteger los bienes ante posibles daños estéticos en el hogar; en otras vendría mejor cubrir sólo el continente, o en otros convendría asegurar también su contenido…
De todos modos, depende mucho del escenario. Si vas a firmar una hipoteca podrías desde asegurar sólo el continente frente a daños por incendio (que es prácticamente el mínimo) hasta optar por proteger también partes del contenido como los muebles, los electrodomésticos y los bienes de valor.
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En las segundas residencias, que quizás corran un mayor riesgo al ser menos visitadas y vigilada (y por lo tanto más expuestas) quizás sea más importante proteger tanto el continente como el contenido.
Si vas a vivir a una casa de alquiler, el propietario podría tener ya asegurado su continente, así que podría bastar con tener un seguro de hogar que cubriera el contenido; es decir, los objetos que vamos a alojar en ella, especialmente si la mayor parte de ellos son nuestros.
