A medida que nos hacemos mayores, la demencia senil puede convertirse en una preocupación real. Puede que nuestra cabeza no esté tan avispada como antes y podemos olvidarnos de las cosas o confundirnos con facilidad. Pero no tiene por qué ser así. Los científicos creen que podemos hacer un algunas cosas para prevenir o frenar el declive cognitivo en etapas posteriores de nuestra vida. Incluso jugar a determinados juegos o realizar ciertas actividades podría suponer un cambio enorme. Hemos leído los estudios más recientes al respecto y hemos encontrado una serie de actividades que te ayudarán a mantener activo el cerebro. ¿Cuáles te animas a probar?
Índice
Ajedrez
Según varios estudios publicados, quienes disfrutan de juegos tácticos como el ajedrez tienen menos probabilidad de desarrollar alzheimer (la forma de demencia más común). El ajedrez es estupendo para desarrollar el cerebro, ya que es fácil de aprender a jugar, pero cada partida es completamente diferente. ¡Si buscas ejercitar la mente, podrías pasar del ajedrez al Go, un antiguo juego chino!
Escribir cartas
Un estudio de la Universidad de California sugiere que las personas que han escrito cartas durante su vida han experimentado un declive mental más lento que aquellos que no las escribían. Enviar y recibir cartas también se recomienda a aquellas personas con síntomas de demencia, ya que ayuda a mantener vivos los buenos recuerdos y a forjar lazos más fuertes con los seres queridos.
Yoga
Un pequeño ensayo de la Universidad de California en Los Ángeles y el Instituto Buck descubrió en 2014 que el yoga y la meditación podrían ayudar a revertir la pérdida de memoria como parte de un programa terapéutico de 36 puntos. Se cree que el yoga ayuda a reducir el estrés y ejercita el cerebro, ya que las personas que realizan la actividad deben recordar posturas y concentrarse en la respiración, el movimiento y la visualización.
Escuchar música
Escuchar, tocar o cantar tus canciones favoritas resulta ser una manera eficaz para lidiar con los síntomas del alzheimer, e incluso reducirlos. Uno de muchos estudios, como este, lo descubrió al registrar la actividad cerebral de los voluntarios, y también observó un aumento en la actividad cerebral y las conexiones cerebrales cuando escuchaban su música favorita. Crea una lista de reproducción que te haga sentir bien y no te olvides de escucharla siempre que puedas. O mejor aún, aprende a tocar un instrumento (si no sabes ya), y aprende a tocar tus canciones favoritas.
Leer
Se ha descubierto que aquellos que leen por placer o pasan su tiempo libre concentrados haciendo crucigramas tienen menor riesgo de deterioro mental. ¿Por qué no te acercas a la biblioteca pública o, mejor aún, organizas un club de lectura donde combinar la lectura y las relaciones sociales?