¿Tienes tendencia a marearte? No eres el único. A millones de viajeros de todo el mundo les cuesta llegar a sus destinos sin mareos o náuseas. Pero, por suerte, aquí tienes algunos remedios sencillos que harán que te sientas mejor en cuestión de segundos.
Índice
Mira siempre al frente
Intenta mantener tus ojos fijos en el horizonte. Cuando sientas que tienes muchas náuseas, cierra los ojos y respira lentamente durante unos minutos.
Respira aire fresco siempre que sea posible
Si viajas en coche, haz una parada y tómate un descanso fuera. Si viajas en autobús o tren, abre una ventana o aumenta el aire acondicionado.
Toma algo de jengibre
Lo creas o no, este remedio natural te puede ayudar a calmar la barriga en un abrir y cerrar de ojos. Pero si no te apetece darle un mordisco a una raíz de jengibre, el jengibre en polvo o en pastillas con un poco de agua también funciona. Si tienes un termo, prueba a hacerte una infusión de jengibre fresco para beber durante el viaje.
Bebe agua
La deshidratación puede provocar mareos, así que mantén tus niveles de hidratación a tope. Pero ¡no te pases con el agua, ya que puede ser peor!
Distráete
Puede que no te apetezca leer ni ver nada, pero si viajas con alguien, pídele que hable contigo. ¡Eso te ayudará a quitarte el mareo de la cabeza!
Prueba la aplicación Vital Tones Vértigo
Si tienes un teléfono con Android, puedes descargarte esta aplicación para minimizar los mareos. Es un tratamiento de 3 sesiones que, a través de los auriculares, envía sonidos a las ondas cerebrales para mejorar los mareos. Estupendo, ¿verdad?
Cambia la configuración de tu teléfono
Los teléfonos de Apple ahora cuentan con una opción que hace que los iconos sean transparentes para que se te canse la vista mientras te mueves. Al seleccionar «Reducir punto blanco» en la configuración, también puedes reducir la intensidad de los blancos de la pantalla. ¡Pruébalo!
Haz comidas ligeras
Al contrario de lo que puedas pensar, viajar con el estómago vacío hará que las náuseas sean mucho peores. Así que come una galletas saladas, uvas o una manzana verde. Pero no comas de más y evita las comidas muy dulces, picantes o copiosas.