¡Si eres padre o madre ya estarás acostumbrado! Muchos bebés, especialmente durante los primeros meses de vida, tienden a regurgitar mientras comen. Es habitual y forma parte del aprendizaje a la hora de tragar y no debería ir a más. Sin embargo, en el caso de que tu bebé vomite porque padece estenosis pilórica, ¡sí deberás llevarle a su pediatra!
Muchos lactantes presentan síntomas de obstrucción del vaciado gástrico a las pocas semanas de nacer. La estenosis pilórica es un problema más frecuente de lo que nos pensamos. ¡Y requiere un tratamiento médico inmediato!
¿No sabes si tu bebé presenta factores de riesgo para la estenosis de píloro? Te contamos qué es y cuáles son los síntomas para el diagnóstico de estenosis pilórica en bebés.
Índice
¿Qué es la estenosis pilórica en bebés?
La estenosis pilórica es el estrechamiento de la válvula que conecta el estómago con el intestino delgado, también llamada píloro. Cuando un bebé la padece, los músculos del píloro se engruesan impidiendo que los alimentos que ha ingerido salgan del estómago.
A esta afección también se la conoce como estenosis pilórica hipertrófica del lactante. La estenosis pilórica la padecen con más frecuencia a los niños menores de 6 meses. Además afecta, en una mayor medida, a los bebés primogénitos varones.
Causas de la estenosis pilórica
Durante el proceso de digestión corriente, el píloro mantiene los alimentos en el estómago hasta que están listos para ser procesados por el intestino. No obstante, la válvula muscular del recién nacido que padece esta patología adquiere un tamaño demasiado grande provocando el vómito.
La causa de la estenosis pilórica se desconoce. La genética del lactante, junto con las afecciones de los padres durante la niñez pueden influir. Sin embargo, varios estudios apuntan a que ¡sí existen factores de riesgo que motiva su aparición!
Síntomas de que tu bebé padece estenosis pilórica
¿No estás seguro de lo que le ocurre a tu hijo? ¡Te contamos los principales síntomas de que tu bebé padece estenosis pilórica!
- Vómitos tras la ingesta. La estenosis se caracteriza por forzar un vómito con fuerza expulsando la leche incluso varios metros. Ten en cuenta que estos vómitos pueden evolucionar progresivamente de menor a mayor intensidad conforme se estrecha el píloro. El por ello que ¡no debes confundirlo con pequeñas regurgitaciones en su fase inicial!
- Contracciones en el estómago después de comer y antes de vomitar.
- Cambio del estado de las heces. La estenosis pilórica suele provocar que las deposiciones sean más pequeñas. Además, la frecuencia también se reducirá. Si esto ocurre, ¡sigue estos consejos para tratar el estreñimiento en bebés!
- Pérdida de peso o dificultades para engordar.
- Apetito constante. La estenosis pilórica del lactante provoca que el bebé quiera comer, incluso después de haber vomitado.
- Deshidratación. Quizás notes que tu bebé llora sin lágrimas o que cambias menos pañales. ¡También puede ser un síntoma de estenosis de píloro!
¡Recuerda! Los síntomas de la estenosis pilórica suelen aparecer entre las 3 y 5 primeras semanas. Por lo general, es poco frecuente en bebés mayores de 6 años. Por ello, ¡se recomienda contar con un plan de asistencia postparto durante los primeros meses de vida para que el pediatra pueda realizar un seguimiento del desarrollo de los primeros meses de vida.
Factores de riesgo habituales
Aunque se desconocen las causas de la estenosis hipertrófica del píloro, algunos estudios han demostrado que existen factores de riesgo que aumentan las probabilidades de sufrirla.
- Antecedentes familiares. Los recién nacidos cuyos padres tuvieron estenosis pilórica tienen hasta un 20% más de posibilidades de desarrollarla.
- Sexo. Los bebés varones tienden a padecerla más que las niñas.
- Fumar durante el embarazo. Si una madre fuma durante el embarazo su bebé presentará hasta el doble de probabilidades de sufrir estenosis pilórica del lactante.
- Alimentarse con leche de fórmula. Algunos estudios apuntan a que la alimentación con biberón puede influir en esta patología.
- Consumo de antibióticos. Determinados antibióticos a temprana edad pueden aumentar los riesgos de padecer esta enfermedad. De la misma forma, el consumo de ciertos antibióticos durante las últimas semanas del embarazo incrementa también el riesgo de sufrirlo.
Te interesa: Guía de enfermedades más comunes de bebés en el primer año
Problemas y enfermedades que puede provocar
La detección precoz de la estenosis pilórica es fundamental para evitar consecuencias más graves en la salud del pequeño. Son frecuentes los problemas de crecimiento o desarrollo si esta enfermedad no se trata adecuamente.
Por otro lado, algunos bebés pueden sufrir cuadros de deshidratación preocupantes. ¡Esto podría desequilibrar sus funciones vitales! La irritación estomacal o los episodios de ictericia también son otras enfermedades que puede provocar la estenosis de píloro.
¿Te has dado cuenta de que la piel de tu bebé ha adquirido un tono amarillento? ¡Quizás su hígado no es capaz de eliminar la bilirrubina! Estos son los remedios contra la ictericia en bebés.
¡No dudes en acudir al pediatra si se da alguno de estos casos para limitar enfermedades más severas!
- Tu bebé sufre vómitos explosivos.
- Le percibes poco enérgico y apático.
- Pierde peso aceleradamente.
- No moja prácticamente el pañal y tiene pocas deposiciones.
Diagnóstico y tratamiento de la estenosis pilórica
Para un adecuado diagnóstico de la estenosis pilórica es imprescindible que un especialista pueda examinar a tu bebé. Si cuentas con un plan de revisiones pediátricas con tu aseguradora, ¡no dudes en trasladar posibles síntomas que hayas observado para favorecer la detección precoz!
El pediatra palpará la parte superior de la tripita de tu hijo en busca de algún pequeño bulto duro del tamaño de una aceituna. Además, una ecografía o un estudio de contraste de las vías gastrointestinales por medio de una radiografía también servirán como pruebas diagnósticas.
Si el diagnóstico resulta positivo, ¡no debes preocuparte! Los tratamientos de la estenosis pilórica consiguen grandes mejorías y son muy efectivos. En ese caso, lo primero que conviene hacer es alimentar al bebé por vía intravenosa para reponer los nutrientes necesarios.
Operación de pilorotomía
Es posible que también se le practique una pilorotomía. Se trata de una intervención quirúrgica para tratar la estenosis pilórica que consiste en cortar el músculo grueso del píloro. Esto facilitará la expulsión de los alimentos bloqueados en el estómago. El post operatorio de la pilorotomía no es complejo y raramente la intervención implica complicaciones.
Recuerda mantener las incisiones de la tripita secas y limpias para evitar una infección tras la operación. Pasados los 3 días, ya podrás limpiarlas con suavemente con jabón. Aun así, no se recomiendo bañar al bebé hasta los 7 días de la intervención.
¡Te interesa! Tras la operación, deberás dar de comer a tu bebé cada 4 o 5 horas. Salvo que el pediatra recomiende lo contrario, podrás alimentarle por vía oral.
Los Seguros de Protección Familiar Salud Opción Family de GENERALI ofrecen asistencia primaria inmediata para recibir un diagnóstico rápido ¡y sin esperas! Si quieres más información, ¡consúltanos sin compromiso!