El deporte te aporta una vida sana y equilibrada, aunque debes practicarlo en su justa medida. Tanto es así que el exceso de ejercicio físico puede ser contraproducente y dejar proporcionar los beneficios esperados para transformar ese esfuerzo en daños para el cuerpo.
Hacer deporte a diario tiene muchos beneficios. Aunque practicarlo en exceso puede tener tantas consecuencias negativas como no hacerlo.
¿Crees que estás llevando a cabo una rutina de exceso de ejercicio físico? ¡Lo más importante es saber identificar las señales de un posible deterioro de tu cuerpo!
Descubre todas las consecuencias del sobreesfuerzo físico para evitar lesiones o complicaciones a largo plazo.
Índice
¿Cómo debería entrenar?
Si quieres ponerte en forma, deberías llevar a cabo un plan de entrenamiento progresivo que vaya de menos a más intensidad.
Además, tendrás que cuidar mucho la alimentación, y, por supuesto, descansar lo suficiente para que el organismo pueda recuperarse del gran esfuerzo al que se somete durante el entrenamiento.
Según la OMS, las personas de entre 18 y 65 años deben practicar 150 minutos de ejercicio físico a la semana. Esto equivale a unos 20 minutos diarios para mantener un bienestar sano y equilibrado.
Sin embargo, el exceso de ejercicio físico no solo tiene que ver con el tiempo que dedicas a practicar deporte. De hecho, la intensidad juega un papel fundamental.
Una actividad aeróbica sostenida en el tiempo que no se acompañe con una dieta calórica apropiada podría desencadenar en un desequilibrio de nutrientes y, por lo tanto, la aparición de enfermedades.
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Consecuencias de ejercicio excesivo
Lesiones
El mayor peligro que puede tener una persona que hace deporte en exceso es el de sufrir una lesión.
Los esguinces, problemas en las articulaciones o en ligamentos son de lo más habitual en deportistas. Debes entrenar de forma progresiva, aumentando el tiempo y la dificultad de los ejercicios. Si expones a tu cuerpo a más de lo que puede aguantar, los riesgos de lesión aumentarán.
La tendinitis suele ser la lesión más común entre las personas que realizan demasiado deporte. Se produce por la repetición de un mismo movimiento prolongado en el tiempo. Ese sobreesfuerzo físico puede dar lugar a diferentes lesiones, dependiendo de la disciplina que practiques:
- Epicondilitis lateral, también conocida como codo del tenista. Suele padecerla las personas que practican deportes de raqueta.
- Epicondilitis medial, comúnmente denominada codo del golfista. Es común entre los que practican golf o entrenamiento de pesas.
- Tendinitis rotuliana o rodilla del saltador. Afecta a los que hacen deportes donde se salta repetidamente como baloncesto, balonmano o voleibol.
También son frecuentes las distensiones musculares entre los que hacen exceso de ejercicio físico. Consiste en la rotura de fibras musculares por un fuerte estiramiento.
Si practicas deportes que requieren correr rápido, salidas explosivas o detenerse bruscamente como fútbol, atletismo o salto de altura, ¡dosifica la intensidad, pues podrías sufrir una distensión de los músculos isquiotibiales!
¿Cómo saber cuando parar para evitar lesiones?
Jesús Calleja nos habla de las principales causas por las que se producen lesiones o roturas en los músculos y los tendones al practicar deporte. También nos comparte sus mejores trucos para evitarlo.
Los tres conceptos básicos que tenemos que tener en cuenta son: calentar, hidratación con sales minerales y estiramiento. Solamente con esas tres cosas probablemente podrás evitar el 95% de cualquier lesión tendinosa o muscular.
En primer lugar, calentar. Nunca empieces a practicar ningún deporte sin antes calentar.
En segundo lugar, la falta de hidratación. Uno de los principales indicativos que tienes que tener en cuenta, ya que la deshidratación va habitualmente acompañada de una rotura muscular o incluso una ruptura tendinosa. Además, si vas a entrenar fuerte y hace calor es muy importante acompañar la hidratación con sales minerales para asimilar el agua y evitar el deterioro celular. Las puedes diluir en el agua o si ves que te hacen daño optar por las pastillas.
Y por último, el estiramiento. Al acabar de entrenar siempre debes estirar tus músculos. Estos han estado trabajando y pueden tener nudos, debes dejarlos laxos. Debes estirar.
Enfermedades por exceso de ejercicio físico
Algunos deportes de impacto también pueden tener consecuencias muy negativas en el cartílago como el que se da en las roturas o desgarros del menisco.
Es frecuente en aquellos que practican disciplinas que requieren que el cuerpo pivote sobre la rodilla. Evita practicar exceso de ejercicio físico en tenis, running, surf o baloncesto para proteger tu rodilla del desgaste.
La rabdomiólisis es una enfermedad por la que se produce un trastorno en las células musculares. Aunque puede ser hereditaria, el exceso de ejercicio físico motiva su aparición.
Puede provocar insuficiencia renal aguda. Un signo evidente de esta enfermedad es el cambio de color de la orina a un castaño oscuro. Además, la rabdomiólisis también se manifiesta por dolores musculares intensos o vómitos.
Entre las consecuencias del ejercicio excesivo se encuentra también la vigorexia. Consiste en un trastorno dismórfico corporal por el que la persona se obsesiona por el desarrollo muscular desmesurado.
Junto con un frecuente entrenamiento de pesas, se suele combinar con una obsesión por la dieta altamente proteica y baja en grasas.
Por su lado, ¡el exceso de ejercicio físico también puede tener consecuencias en la salud mental! La depresión y la baja autoestima son otras de las patologías que aparecen en personas que practican deporte a diario.
Marcarte unos objetivos está bien, pero si son muy altos y luego no los cumples, podrías desarrollar caídas de ánimo generadas por la derrota.
Consulta también nuestra guía sobre los beneficios de la meditación para complementar tu práctica deportiva.
Agotamiento físico
El descanso es otro de los pilares fundamentales del deporte. A la hora de hacer ejercicio, la mente también se somete a un gran esfuerzo y esa fatiga puede impedir que la persona descanse bien.
Hay muchos casos de atletas con problemas severos de insomnio.
Para evitar el agotamiento físico, es recomendable mantener una buena rutina de sueño. Dormir las horas recomendadas te ayudará a recuperar el estado de tu cuerpo después del esfuerzo físico. ¡Descubre estos 6 consejos para ayudarte a dormir mejor!
Anemia y otras deficiencias del sistema inmune
La alimentación es una de las piezas clave en la vida de todo deportista.
Si haces mucho deporte y no tienes una rutina de alimentación adecuada, podrías, incluso, perder masa muscular y conseguir un resultado opuesto al deseado. ¡Estos son los alimentos que debes comer antes y después de practicar ejercicio!
La llamada anemia del deportista suele aparecer en atletas de alto rendimiento o personas que practican exceso de ejercicio físico. Entre los motivos se encuentra la falta de hierro en el organismo.
La sudoración, las microlesiones y la velocidad de tránsito intestinal pueden provocar una rápida pérdida de hierro. ¡Combate la anemia una dieta rica en espinacas, legumbres, semillas de calabaza o quinoa!
Además, entrenar de forma excesiva puede provocar que el sistema inmunológico de la persona baje. Esto se debe a que el ejercicio físico de alta intensidad provoca alteraciones en los anticuerpos y glóbulos blancos.
Si esto ocurre, el cuerpo estaría debilitado y podría enfermar con mucha más facilidad. ¡Descubre cómo fortalecer el sistema inmunológico con estos super alimentos!
Cómo afecta el exceso de ejercicio al corazón
El corazón puede sufrir ante situaciones de gran esfuerzo. Es un músculo más de nuestro cuerpo que, sometido a entrenamientos demasiado exigentes, podría desarrollar algún tipo de afección como las comunes taquicardias.
De hecho, algunos estudios apuntan a que un exceso de ejercicio físico puede perjudicar gravemente a la actividad del corazón, aumentando el riesgo de fallecimiento por un ataque al corazón o un derrame cerebral. Eso sí, parece que afectaría solo a pacientes con una enfermedad cardíaca existente.
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Exceso de ejercicio físico en el embarazo
Durante tu embarazo no es recomendable realizar un exceso de ejercicio físico. En concreto, ¡evita la actividad física aeróbica de gran intensidad!
Esto se debe a que los cambios hormonales hacen que las articulaciones estén menos preparadas para la actividad física, aumentando el riesgo de luxaciones y esguinces.
Además, realizar un sobreesfuerzo durante el embarazo supone un mayor riesgo de tener un parto prematuro. También puede provocar malformaciones fetales y deficiencias en el crecimiento intrauterino, si no se ejercita con precauciones.
¡Pero eso no quiere decir que no debas cuidar tu forma física! Prepara tu cuerpo con una tabla de calentamientos previos a la actividad física.
También es recomendable que realices 10 minutos de estiramientos una vez finalizada la actividad, para que tus músculos recuperen su posición de reposo.
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Exceso de ejercicio físico en niños y adolescentes
Algunos niños y adolescentes sufren lo que se llama un ejercicio físico compulsivo. Ocurre cuando no pueden dejar de practicar deporte, aún si sufren una lesión o padecen malestar general.
Además, priorizan el deporte por encima de sus relaciones con familiares o compañeros de clase.
Pasados los 12 años, el exceso de ejercicio físico en niños puede estar también relacionado con algún trastorno de alimentación. La necesidad de querer bajar de peso rápidamente quemando muchas calorías podría estar detrás de esta adicción.
Los efectos del ejercicio físico en el cuerpo de los niños y adolescentes pueden derivar en lesiones por sobrecarga o fracturas por estrés. Además, también puede afectar a la concentración y rendimiento en el colegio.
Preguntas frecuentes sobre los riesgos del exceso de ejercicio físico
¿Qué se considera exceso de ejercicio?
Se considera un exceso de ejercicio físico a aquel que está por encima de la capacidad de rendimiento del organismo. Habitualmente se da en personas que sienten una necesidad imperiosa por continuar con la actividad física, sin atender a molestias o lesiones.
¿Puede el exceso de ejercicio físico causar osteoporosis?
El exceso de ejercicio físico puede conducir a una pérdida del contenido mineral del hueso, causando osteoporosis. En concreto, puede derivar en fracturas por sobrecarga y alteraciones en las articulaciones. Los ejercicios de fuerza o movimientos contraindicados, como rotaciones o extensiones extremas pueden aumentar el riesgo de padecer osteoporosis.
¿Cómo afecta el exceso de ejercicio físico a nuestro cuerpo?
Los primeros síntomas del exceso de ejercicio tienen que ver con el deterioro físico. Son comunes las lesiones como microfracturas o esguinces. También se acelera el envejecimiento celular, dando lugar a enfermedades. Es común un debilitamiento del sistema inmune, patologías cardiacas o problemas de articulaciones.
Si tu intención es hacer deporte de forma saludable, ¡no necesariamente debes llevar tu cuerpo al punto máximo! En GENERALI, te recomendamos que tu objetivo sea disfrutar con el deporte, ejercitar tu cuerpo sin hacerle sufrir.
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