Correr es uno de esos ejercicios magníficos que puedes hacer en cualquier momento y en cualquier lugar. Esto implica que puedes adaptarlo a tu estilo de vida durante todo el año.
Aquí te dejamos algunos consejos para que sigas saliendo a correr de forma segura y cómoda haga el tiempo que haga.
Índice
Elige el momento
Definir una rutina regular ayuda mucho a hacer del ejercicio una parte fundamental de tu vida, así que encuentra un día y una hora para hacerlo cada semana.
Puede que tengas que adaptar tu rutina a los cambios de estación. Por ejemplo, en verano, ve a correr temprano por la mañana antes de que haga demasiado calor o por la tarde, cuando el sol se está poniendo. Si es posible, procura salir a correr en las horas de luz en invierno.
Utiliza el equipamiento adecuado
Es crucial proteger tus articulaciones con el calzado adecuado. Muchas tiendas de running ofrecen un estudio gratuito de tu pisada para que puedas encontrar las mejores zapatillas para ti.
También es importante que lleves el teléfono contigo en caso de emergencia, así que busca un equipamiento con bolsillos con cremallera.
En invierno, es posible que también quieras invertir en una chaqueta cortavientos, una cinta para la cabeza y guantes.
Cambia tu ruta
Cualquier actividad que hagas de forma regular puede convertirse rápidamente en algo trivial a menos que consigas que siga siendo divertida y nueva, así que planifica rutas diferentes y explora nuevas zonas.
Correr es una gran oportunidad para adentrarse en nuevas áreas naturales y conocer nuevos lugares, pero recuerda hacer un seguimiento de tu ruta y tener activado el GPS en tu teléfono por si te pierdes.
Incorpora entrenamientos de intensidad variable a tu carrera
Lo ideal sería que combinases diferentes grados de intensidad en tu entrenamiento para sacar el máximo provecho. ¿Por qué no caminar durante los primeros 5 minutos de tu carrera, trotar durante 15 minutos, correr rápido durante 10 minutos y luego repetir?
Calienta al principio y estira al final
El calentamiento es muy importante en cualquier estación del año. Asegúrate de estirar los músculos y empezar a correr trotando suavemente antes de aumentar la intensidad, ya que esto ayuda a prevenir lesiones. Dedica también unos minutos a estirar al final.
A veces todos necesitamos un poco de motivación para seguir haciendo ejercicio durante los meses más fríos, así que ¿por qué no buscar un amigo con el que puedas salir a correr? También puedes fijar una meta, como entrenar para una carrera o una maratón, para ayudarte a mantenerte en el buen camino.
Date una recompensa
Es importante reconocer el trabajo duro y los logros que consigues, y el ejercicio no es una excepción.
No tengas miedo a darte el gusto de tomar una de tus comidas favoritas o lo que sea que te haga feliz cuando has tenido una buena sesión de running.
El entrenamiento debería ser un aspecto positivo de tu vida, y hacer esto te ayudará a sentirte así.
No te pierdas todo el contenido que te puede ayudar a estar en forma y sano ¡para tu próxima aventura!