La piel seca puede notarse tirante e incómoda y, a veces, puede producir picor y pelarse.
Es común pensar que una piel deshidratada y una piel seca son lo mismo, pero los motivos de una y otra son muy diferentes.
Una piel seca requiere una rutina de cuidado diario adecuada. Aquí te dejamos algunos sencillos consejos para ayudarte a encontrar la rutina que mejor se adapte a ti.
Índice
Comprueba los ingredientes
Elige cremas untuosas que se absorban rápidamente en la piel. Busca productos que contengan aloe vera y manteca de karité, que son ingredientes especialmente calmantes.
Otros ingredientes adecuados para pieles secas son el ácido glicólico, que se encuentra de forma natural en la caña de azúcar y en frutas como las uvas, y el ácido hialurónico, que es perfecto para ayudar a retener la humedad.
Hidratar, hidratar e hidratar
Los productos hidratantes, los bálsamos y las cremas actúan atrapando la humedad de la piel, por lo que es bueno usarlos justo después de limpiar el rostro.
Utiliza agua templada en lugar de agua caliente durante la limpieza y sécate la cara suavemente y sin frotar con una toalla. También es recomendable evitar exfoliar en exceso y utilizar limpiadores suaves.
Invierte en un humidificador
El aire frío y seco puede empeorar las pieles secas, por lo que es bueno mantener el ambiente en casa lo más húmedo posible.
Los humidificadores son geniales para esto. Cuando te duches mantén la puerta cerrada para atrapar la mayor cantidad de humedad posible.
Son muchos los factores ambientales y externos que pueden empeorar las pieles secas. Por ejemplo, la calefacción y el aire acondicionado pueden resecar la piel, así como algunos alimentos como los lácteos, los cítricos y las especias.
Lo ideal es llevar un diario sobre el estado de tu piel, de forma que puedas llevar un seguimiento de tu piel diariamente y adaptar tu rutina con el tiempo.
Cada piel es única, por lo que tendrás que probar diferentes rutinas para averiguar cuál es la que te funciona.