Cada niño tiene su propio proceso de aprendizaje y desarrollo. Ni todos aprenden a comunicarse a la misma edad, ni tampoco a andar o a ser más autónomos. Como madres y padres, es importante no caer en la alarma si detectamos que el niño va un paso por detrás que el resto. El retraso madurativo adopta diversas formas, muchas de ellas leves y transitorias.
De hecho, el retraso madurativo en niños no es un diagnóstico, sino más bien una observación del pediatra o especialista. Por este motivo, es muy recomendable educar al niño con paciencia y observar los progresos que hace. En estos casos, será de vital importancia conocer el origen por el que la madurez del niño se ha ralentizado, y así determinar si es necesario un seguimiento más específico o simplemente una característica que se corregirá con el tiempo.
En España, se calcula que el 10% de los niños de entre 0 y 6 años necesita algún tipo de ayuda psicomotriz. No obstante, las estadísticas son demoledoras. Solo 4 de cada 10 pequeños con problemas de desarrollo reciben un tratamiento.
¿Qué es el retraso madurativo en niños y por qué se produce? ¿Cuáles son los síntomas de retraso madurativo en los que debes fijarte para determinar su gravedad? ¿Puede evolucionar e ir a peor? Te contamos todos los detalles en este artículo.
Índice
¿Qué es el retraso madurativo en niños y por qué se produce?
¿Qué es el retraso madurativo en niños? El retraso madurativo es un término usado en aquellos niños que no alcanzan determinados objetivos de su neurodesarrollo a la edad cronológica que se espera. O, dicho de otra forma, significa que un niño no se desarrolla a la misma velocidad que el resto.
Esta ralentización puede verse reflejada en distintas áreas: en el lenguaje, en su capacidad de comunicación, a nivel motor o en la autonomía y madurez. En cualquier caso, es muy importante compartir con el pediatra tus inquietudes lo antes posible. Contar con un plan de seguimiento pediátrico para tu hijo facilitará la detección precoz y la aplicación de un tratamiento si fuera necesario.
Pero, ¿por qué se produce el retraso madurativo en niños? Estas son las principales causas asociadas:
- La prematuridad en el nacimiento.
- Falta de estimulación cognitiva. Los bebés necesitan contar con estímulos familiares y externos para conformar su personalidad. ¿Sabías que existen formas de potenciarlos? ¡Descubre los mejores ejercicios de estimulación temprana para bebés de 0-12 meses!
- Causas hormonales, genéticas o infecciosas.
- Trastornos del espectro autista.
- Síndrome de Asperger.
- Síndrome de Down.
- Posibles traumatismos que hayan podido afectar a su desarrollo. En concreto, debes tener especial cuidado con los golpes de cabeza en niños. ¡Aprende a identificar su gravedad!
- Circunstancias que afectan negativamente al embarazo o al parto también pueden provocar síntomas de retraso madurativo en niños.
¿Cuál es la diferencia entre retraso mental y retraso madurativo?
La principal diferencia entre el retraso madurativo y el retraso mental es que el primero tiene un componente cronológico. Esto quiere decir que el niño se desarrolla notablemente más lento que otros niños, pero sí sigue la pauta normalizada.
No ocurre con otros trastornos. En el caso del denominado retraso mental o capacidad intelectual límite existe una desviación del patrón de desarrollo.
Por regla general, aquellos niños con retraso madurativo en la escuela suelen acabar alcanzando niveles de desarrollo similares a sus compañeros de clase si se dan las condiciones adecuadas. ¡Y es aquí donde es esencial poner el foco! El apoyo familiar junto con el seguimiento de un especialista serán determinantes.
Características y síntomas de retraso madurativo en niños
A edades tan tempranas, no es fácil identificar qué tipo de trastorno sufre el niño. Aun así, existen algunos síntomas de retraso madurativo en niños que te ayudarán a prestar más atención a una conducta determinada de tu hijo.
- Tardar más de un año en balbucear sus primeras palabras.
- Empezar a gatear pasado su primer año de vida.
- Cuando el niño no es capaz de reconocer sonidos como la voz de sus padres, el ladrido de un perro o al timbre de casa.
- Otro síntoma de retraso madurativo en niños es no reaccionar a su propio nombre.
- Cuando no muestra interés por sus juguetes o actividades preferidas.
- Si no es capaz de imitar sonidos, ritmos o gestos de los adultos.
👉 ¡Te interesa! Matronatación: beneficios para los bebés y cuándo empezar
Tipos de retraso madurativo en niños
El retraso madurativo en niños puede adoptar distintas manifestaciones según la persona. En función de las áreas en las que demuestra carencias se pueden aplicar distintos enfoques para potenciar su desarrollo. ¡Estos son los tipos de retrasos madurativos más comunes!
1. Cognitivo
El retraso madurativo cognitivo está vinculado con el desarrollo intelectual del niño. Se identifica cuando presenta dificultades de aprendizaje. En este sentido, es la guardería o escuela el entorno donde más evidente es.
👉 ¡Te resultará útil! Dislexia en Niños, ¿Cómo Detectarla y Tratarla a Tiempo?
2. Habilidades motoras
Por su lado, el retraso madurativo de las habilidades motoras está relacionado con la capacidad para coordinar los movimientos. Algunos bebés con esta patología tienen dificultades para voltearse, gatear, subir y bajar escaleras o sostener sus juguetes. Es común que se confunda erróneamente con la torpeza.
3. Lenguaje
Los niños con retraso madurativo en el lenguaje no solo presentan problemas para hablar. También se asocia a dificultades para identificar conceptos, formas o partes del cuerpo.
Un niño con este tipo de dificultades en el lenguaje generalmente comenzará a balbucear sus primeras palabras más tarde que el resto. Además, es frecuente que esta anomalía en su desarrollo venga acompañada de un retraso social.
4. Comportamiento social
Cuando hablamos de un retraso madurativo en el comportamiento social nos referimos a los desafíos sociales, emocionales o conductuales que presenta. Podrás identificarlo si tu hijo tiene problemas para lidiar con la frustración, no es capaz de mantener conversaciones bidireccionales. También es común que los niños con retraso madurativo en la escuela no interactúen con sus compañeros de clase.
¿Cuánto dura el retraso madurativo?
Hablamos de un retraso madurativo en niños cuando existe una ralentización en su desarrollo que dura entre 6 y 24 meses. Es probable que cualquier otra desviación de los patrones de madurez fuera de esa pinza de tiempo tenga que ver con un trastorno diferente.
¿El retraso madurativo puede evolucionar e ir a peor?
Por regla general, los niños con síntomas de retraso madurativo suelen evolucionar positivamente. De hecho, es frecuente que, con un tratamiento adecuado y el apoyo del círculo familiar, logren alcanzar el mismo ritmo que sus compañeros.
Ahora bien, si no se produce una detección del trastorno a tiempo o se le da poca importancia a las recomendaciones del especialista, el problema puede ir a peor. Tanto es así, que el niño podría no alcanzar nunca el ritmo de desarrollo adecuado y arrastrar dificultades durante su infancia y adolescencia. Por este motivo, ¡contar con el apoyo de sus profesores también resultará muy positivo!
¿Cuál es la solución o tratamiento al retraso madurativo?
Existen centros de atención temprana para niños que presentan dificultades en el desarrollo con profesionales multidisciplinares. En ellos, se realizará una primera evaluación del pequeño para identificar las áreas en las que debe hacerse más hincapié.
El tratamiento al retraso madurativo incluye sesiones con psicólogos, logopedas y fisioterapeutas basadas en la estimulación. Incluso los mejores tratamientos incluyen un programa de seguimiento neurológico donde se practica una vigilancia de sus avances. De hecho, se recomienda que este seguimiento se realice hasta la edad de los 6 años.
El apoyo de un programa especializado es siempre recomendable para garantizar un buen tratamiento de retraso madurativo. Los Seguros de Salud de GENERALI ofrecen un programa de seguimiento PERSONALIZADO con acceso a todo tipo de especialistas en logopedia, fisioterapia, pediatría especializada o psicología infantil, ¡y sin esperas! Si quieres más información, ¡consúltanos sin compromiso!
