Descubre todas las ventajas y coberturas que tiene un seguro médico ginecológico para la mujer. ¿En qué consiste? ¿Cómo escoger el adecuado y que hay que tener en cuenta para elegir bien cuál es el que conviene?
Lee este post en el que te contamos todo acerca del seguro médico ginecológico.
Índice
¿Qué es el seguro médico ginecológico privado?
Deberíamos empezar por definir qué es un seguro ginecológico, pero lo cierto es que la especialidad de ginecología -así como la de obstetricia- forma parte de la oferta de los mejores seguros médicos privados, como es el caso de los de GENERALI. Es decir, dentro de algunos seguros médicos se incluyen tratamientos y coberturas relacionadas con la ginecología, por lo que no existe un seguro sólo ginecológico; ni tan siquiera un seguro médico sólo ginecológico.
Recordamos que la ginecología es una rama de la medicina especializada en el estudio y diagnóstico (y, si hiciera falta, tratamiento de enfermedades) de los órganos reproductivos femeninos. La obstetricia, por su parte, se centra más en la atención durante el periodo de embarazo, parto y postparto de la mujer.
Las mujeres de cualquier edad deben pasar periódicamente, por precaución y prevención, por consulta ginecológica; y, por supuesto, disponer de una continua atención durante el periodo de embarazo, parto y postparto. Por eso es tan importante que los seguros médicos privados incluyan una buena y completa atención ginecológica y de obstetricia.
Qué coberturas incluye el seguro médico ginecológico
Las coberturas dependerán de la aseguradora en que se haya confiado a la hora de contratar el seguro médico de salud y del seguro en concreto que se haya contratado. Es importante, como siempre decimos, conocer qué incluye el contrato de seguro con respecto a ginecología, para saber qué coberturas ofrece tu seguro en este aspecto de la medicina y que atención te puede facilitar.
Acceso a especialistas
El acceso a especialistas en esta rama de la medicina es la base. Que la clienta pueda consultar con profesionales especializados en esta área cada vez que lo necesite (expertos que puedan comprobar y estudiar su estado, aconsejarle y derivarle a otros servicios si hiciera falta) es una de las principales coberturas de un buen servicio ginecológico.
Acceso a medios de diagnóstico y tratamientos
Además de facilitar el acceso a especialistas, es fundamental que la persona interesada pueda acceder a la realización de las pruebas de diagnóstico que sean necesarias -como ecografías, mamografías o citologías- así como a los tratamientos que se requieran (por ejemplo, sesiones de quimioterapia en caso de cáncer o de rehabilitación del suelo pélvico para mujeres que hayan dado a luz hace poco).
Seguimiento del embarazo
Por supuesto, una cobertura fundamental, ya que la obstetricia siempre debe acompañar a la ginecología y es el periodo en la vida de la mujer en la que más vigilancia se debe poner sobre su salud ginecológica… y sobre la salud de la criatura que está a punto de nacer. Disponer de seguimiento y control del embarazo por medio de sesiones de consulta, ecografías o test prenatales, así como asistencia para la preparación al parto, es una prestación fundamental de un buen seguro de salud con asistencia ginecológica.
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Hospitalización
Si el seguro de salud cuenta con hospitalización, debe también incluir la hospitalización obstétrica, integrando como es lógico el servicio de atención al parto y ofreciendo la atención adecuada, más allá de la quirúrgica, en ese momento tan importante.
Programas de prevención
Por último, en la salud ginecológica también es muy importante la prevención, así que un seguro de salud completo en esta especialidad debe proveer de revisiones ginecológicas periódicas -generalmente, anuales- y aconsejar a las clientas en materia de prevención de enfermedades en esta área de su cuerpo.
¿Cómo elegir el mejor seguro ginecológico? Consejos que debes tener en cuenta
Para empezar, tienes que fijarte bien en las condiciones del contrato, incluido en la letra pequeña. Debes saber qué coberturas te ofrece el seguro y en qué condiciones, así como otros aspectos.
Estas son algunas de las cosas a considerar:
Cuadro médico
Que el seguro disponga de un cuadro médico extenso tanto en profesionales como en centros y medios es fundamental. También es importante que cuentes con esos medios cerca de donde vives, para que los desplazamientos te sean más rápidos y cómodos y menos costosos.
Periodos de carencia
Hay que fijarse en los plazos de carencia, que son inevitables (y lógicos) en cualquier seguro médico. En este caso, como hablamos de ginecología, es importante mirar qué carencias tienen las prestaciones relacionadas con el embarazo y el parto, así como cuáles tienen las intervenciones quirúrgicas.
Copagos
Conocer si existen copagos es otro deber del cliente, al que le viene fenomenal saber qué servicios hay que pagar, y en qué condiciones, y cuáles no, pues están incluidos de manera gratuita en el seguro de salud.
Límite de reembolso
Otro aspecto importante es conocer cuáles son los límites de reembolso y los porcentajes de devolución del dinero -si los hubiera- por el uso de determinados servicios médicos relacionados con la ginecología y la obstetricia
Ventajas y coberturas extra
También hay que tener en cuenta si la aseguradora ofrece otras ventajas y coberturas adicionales relacionados con la ginecología, desde medicina preventiva a tratamiento de infertilidad en la pareja, tratamientos de fertilidad para mujeres mayores de 40, etcétera.
Ventajas de contar con un seguro ginecológico privado
Como ya supondréis, las ventajas de contar con un seguro ginecológico privado (o, mejor dicho, de un seguro médico privado que disponga de atención ginecológica) son muchas, y no difieren de las que supone contar con un seguro de salud, aunque en este caso nos centremos en ginecología y obstetricia.
Desde una atención personalizada y, en líneas generales, más cercana, hasta el acceso rápido a los profesionales, tratamientos y servicios médicos, evitando las temidas listas de espera, pasando por la elección del centro o especialista que se quiera dentro del cuadro médico disponible.